domingo, 13 de mayo de 2012

Resumen Salida Senderismo en el Guadalquivir



La Vega del Guadalquivir nos ofrece un enorme potencial ecológico y cultural, tal y como se ha podido demostrar la ruta que hoy hemos realizado.

El trazado lo realizamos en parte, por la Cañada Real Soriana, el sendero de Gran Recorrido (GR/48), los sotos del Guadalquivir y otros caminos públicos.
Los nueve kilómetros recorridos han tenido un gran contenido interpretativo, nos han enseñado entre otras cosas, cómo el hombre desde hace siglos a intentado domesticar los cauces conduciéndolos para mover las piedras de los molinos. Hemos tenido el honor de que Antonio, propietario del Molino del Rey Alto, de primera mano nos haya descrito como era el mecanismo de este molino harinero que cogía el agua del arroyo Guadalbaida y que estuvo funcionando hasta los años 60. Además de enseñarnos su huerta, llena de diversos árboles frutales, hortalizas, etc. dándonos detalles de cómo la cuida de la manera más ecológica, igual que lo hacían sus antepasados, también las manualidades que realiza con varetas de olivo, como canastos, lámparas, etc., toda una forma de conseguir los alimentos y una artesanía que se encuentra en peligro de extinción.

Visitamos una antigua fábrica de papel abandonada en 1914, en la actualidad hundida entre la vegetación del soto, como el casco de un viejo barco en el fondo del mar.

Son muchas las personas las que hacen muchos kilómetros, a veces cientos, para intentar ver especies emblemáticas de la fauna ibérica, como por ejemplo la Cigüeña negra o la Nutria, quizás por entender que sólo éstas viven en lugares tan conocidos como Monfragüe o Doñana y que a veces nos pasa que conocemos lo más lejano y desconocemos lo que tenemos al lado de donde vivimos.

Salir andando desde la misma localidad de Posadas y en algo menos de dos kilómetros estar inmerso en pleno hábitat de mamíferos como el tejón, el meloncillo, el gato montes, la jineta y la Nutria es un autentico lujo, más aún si tenemos en cuenta que esta última especie está catalogada como vulnerable a la extinción. Pues bien, en este recorrido se ha tenido la oportunidad sin mucho esfuerzo, de enseñarles a los participantes lo cerca que tenemos a estas especies, como son sus rastros y donde habitan. Y es que aquí la ribera del Guadalquivir se encuentra en un buen estado de conservación, y en su orla alberga álamos blancos, fresnos, sauces, sauzgatillos, eneas, carrizos, etc., aunque también alberga grupos de eucaliptos de gran porte.

En esta selva fluvial continuamente nos acompañan multitud de aves con sus cantos, especies como el ruiseñor común, la curruca capirotada y la oropéndola, todo un gozo para nuestros oídos.

Salimos de las alamedas del río regresando dirección a Posadas, caminando entre naranjos y otros cultivos y contemplando el paisaje de la fértil vega y la campiña. 

Para conocer mas sobre nosotros en:

www.cordobaviva.com

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